La obra de Zorrilla no fue tanto fuente sino catarata que inspiró a docenas de autores dramáticos a lo largo del siglo XIX y bien entrado el siglo XX. (...) Desde el principio el autor concibió una obra profundamente cristiana, una obra que marcara el contraste entre el pagano mundo romántico que dominaba las tablas españolas de su época y una nueva visión armónica del mundo. Zorrilla adoptó brillantemente, para su obra, elementos de otros dramas y de otros géneros literarios. (Introducción de David T. Gies)
Poeta y dramaturgo español nacido en Valladolid.
Cultivó todos los géneros poéticos: la lírica, la épica y la dramática. Hay tres elementos que marcarán su vida y su obra: la relación con su padre con el que nunca se entendería debido a su carácter duro y absolutista y la carga que ello supuso para el autor; su pasión por las mujeres (se casó dos veces y tumo numerosas amantes) y por último, su salud, sufría alucinaciones y cuando le detectaron un tumor su comportamiento cambió radicalmente.
Decían de él que era ingenuo, amigo de todos y que no le importaba el dinero, cosa que le acarreo muchos problemas de deudas. Fue amigo de Alejandro Dumas, George Sand y Victor Hugo en sus estancias en Paris.
Entre sus obras cabe destacar: Don Juan Tenorio, El drama del alma, Cantos de un trovador, Juan Dándolo y El zapatero y el rey
David T. Gies es catedrático de literatura española del departamento de italiano, portugués y español de la Universidad de Virginia.